
Conozca cuáles son las expectativas y desafíos que expresaron los primeros delegados y delegadas de la Mesa en su primer encuentro con Colombia Nos Une.
Por: Santiago Peña Aranza
La conformación de la Mesa Nacional de la Sociedad Civil para las Migraciones, establecida en la Ley 2136 de 2021 y cuya convocatoria se reglamentó con la Resolución 2996 de 2024, representa un hito en la participación de las comunidades migrantes en la formulación y seguimiento de la política migratoria en Colombia.
A mediados de enero de 2025, Colombia Nos Une organizó unos primeros encuentros virtuales con los delegados y delegadas elegidos el pasado mes de diciembre, donde se conocieron y conversaron sobre sus expectativas frente a la Mesa, destacando la importancia de la estructuración, la pedagogía y la sostenibilidad del proceso.
Consolidación y enfoque de la Mesa
Uno de los puntos recurrentes en las discusiones ha sido la necesidad de consolidar la Mesa como un espacio legítimo y funcional. Los delegados enfatizaron que este organismo no será la solución inmediata a todos los problemas, sino un mecanismo para visibilizar problemáticas y proponer soluciones. Para ello, insistieron en la importancia de ir paso a paso y de mantener un enfoque claro, evitando la dispersión de esfuerzos.
Asimismo, se destacó que la Mesa debe contar con una reglamentación interna bien definida y mecanismos de comunicación efectivos, tanto internos como externos. Se resaltó la necesidad de diferenciar la Mesa del Sistema Nacional de Migraciones y de precisar su relación con entidades como las embajadas y consulados.
La participación y la voz de las comunidades migrantes
Los delegados de la diáspora señalaron que esta es una oportunidad única para que sus voces sean escuchadas. Expresaron que, históricamente, las decisiones sobre migración han sido tomadas desde Bogotá sin un conocimiento profundo de las realidades que enfrentan los colombianos en el exterior. Por ello, la Mesa se percibe como un espacio donde se pueden representar las inquietudes, necesidades y sueños de las comunidades migrantes.
Sin embargo, también manifestaron incertidumbre sobre su rol y alcance dentro de la Mesa, así como la necesidad de contar con recursos técnicos, financieros y logísticos para desarrollar su labor. Además, hicieron un llamado a garantizar la sostenibilidad de la Mesa en el tiempo, evitando que dependa únicamente de coyunturas políticas.
Desafíos y proyecciones
Desde la perspectiva de los retornados y migrantes regulares, se subrayó la necesidad de fortalecer el reconocimiento de estas poblaciones en la política migratoria. Se evidenció que muchas personas desconocen el concepto de retornado y que es crucial realizar un trabajo pedagógico para aclarar los alcances de la Mesa y su impacto en la población migrante.
También se destacó la importancia de la participación local, ya que muchas de las dificultades que enfrentan los migrantes no están siendo abordadas en los territorios.
Se propuso articular a entidades como Migración Colombia y fortalecer el trabajo en frontera. Asimismo, se hizo un llamado a incluir en la agenda temas como la caracterización de la población migrante, la prevención y protección frente a riesgos asociados a la migración, y la implementación efectiva de la Política Integral Migratoria en los Planes de Ordenamiento Territorial y Planes de Desarrollo.
Hacia una Mesa operativa y sostenible
Para que la Mesa cumpla su función, se enfatizó en la necesidad de operatividad: que las discusiones se traduzcan en acciones concretas. También se hizo un llamado a garantizar que la Mesa no se convierta en un espacio partidista y electoral, sino en una plataforma de participación democrática y pluralista cuyo único objetivo sea el tema migratorio.
Finalmente, los delegados coincidieron en que este es un proceso en construcción, en el que el respeto será fundamental para el trabajo de los delegados y demás miembros de la Mesa, en la que seguramente habrá muchas formas diferentes de ver el mundo.
Finalmente, se advirtió que si bien era necesario un reglamento o protocolo de acción en las dinámicas de trabajo, probablemente este necesitaría ajustes más adelante al ser la Mesa un espacio de participación inédito.
Los delegados y delegadas también expresaron su compromiso y expectativa de que la Mesa se convierta en un espacio efectivo para fortalecer la política migratoria colombiana y mejorar la calidad de vida de la población migrante y retornada.