La presión contra el líder libio Muamar Gadafi se intensificará hasta que deje el poder, dijo el martes el presidente estadounidense, Barack Obama, durante una conferencia de prensa conjunta con la canciller alemana, Angela Merkel.
"La canciller y yo hemos sido muy claros. Gadafi debe dejar el poder y rendir cuentas a los libios, y la presión se intensificará hasta que lo haga", declaró Obama.
Hasta ahora, Estados Unidos y Alemania se habían mostrado divididos en torno a los esfuerzos internacionales para obligar a Gadafi abandonar el poder, y Berlín se abstuvo en el Consejo de Seguridad de la ONU (del que es miembro no permanente) en la votación que autorizó ataques militares.Pero Merkel dijo que Alemania estaba "comprometida con la causa libia" y el éxito de la misión de la OTAN, pese a su abstención en el seno del Consejo de Seguridad.
Varias semanas de bombardeos aéreos contra objetivos del régimen no han logrado hasta el momento aflojar el control de Gadafi sobre el país, pero Obama aseguró que hay una "inexorable tendencia" hacia su salida del poder.